LA PRIMERA PIEDRA

Sábado, 5h de la tarde, parada del autobús. Me topo de frente con una silueta que a primera vista,  parece salido de una novela de Bram Stoker, dirigiéndose a una fiesta de disfraces. Es alto, delgado, andrógino, el pelo rubio platino peinado hacia arriba, vistiendo un traje gris impoluto, la cara cubierta de base de maquillaje y los ojos pintados de negro.  Intento disimular mi sorpresa y saludo. 

El chico que no debe de tener más de 25 años, me pide educadamente que le ayude a ponerse una pulsera de plata que dice no haber conseguido  cerrar  antes de salir de casa. Sorprendida y reconociendo mi desconfianza, miro a ambos lados y no veo a nadie mas susceptible de pegarle un tirón a mi bolso.  Asiento y al acercarme, distingo en la solapa de su traje, un medallón con una cara del Cristo y al cogerle  la mano, veo que lleva un cirio. Insiste en que la pulsera debe de llevar su nombre a la vista,  Iván.  No consigo hacerme con el cierre y empezamos a hablar.  Le pregunto si es miembro de alguna cofradía. La del Cristo de Nazaret.  Consigo ponerle la pulsera,  me da las gracias y subimos al mismo autobús. Conversamos durante el trayecto y me cuenta que desde hace años,  es miembro de esa cofradía, que podría irse de fin de semana con sus amigas pero que prefiere asistir a las  procesiones de la Semana Santa Marinera de la ciudad.

 Me vienen a la cabeza, los pasos, los costaleros, los penitentes,  las bandas de música y el olor a incienso. Me pregunto con que ojos verá la gente a un cofrade andrógino, ferviente creyente y devoto a su Cristo. Recuerdo  las  palabras de la parábola de la mujer adultera y pienso que parece que esos tiempos, no había hombres adúlteros. Pienso en lo que queda hoy de los siete pecados capitales, la lujuria, la gula, la ira, la avaricia, la pereza, la envidia y la soberbia que practicamos todos casi a diario con regocijo y que ya pasan desapercibidos.  Añado a la lista, el que considero el peor y al que tengo más miedo, el rechazo a las diferencias.

Así que el que no haya cometido ninguno de esta lista...... que tire la primera piedra.